Think tanks: las usinas del pensamiento político
Por Pablo López Herrera (1)
Un navegante determina su derrota de acuerdo al destino de su viaje y confía en cartas náuticas confeccionadas por personas que no conoce pero en cuya autoridad confía. Ese mismo navegante, en otros aspectos más importantes de su vida actúa de una forma llamativamente irracional. Aunque nunca hayamos puesto los pies en un barco, todos somos navegantes de la vida. A veces nos dejamos llevar por el viento o la corriente más favorable, aunque el destino final sea el más alejado de nuestras necesidades. A veces no sabemos que dirección tomar por mas cartas que consultemos. A veces elegimos un destino y tomamos el rumbo equivocado. Pero siempre nos dirigimos hacia algún destino, aunque sea un "anti destino", y necesitamos siempre cartas náuticas actualizadas para ubicarnos donde podamos ver los obstáculos a evitar, los canales y las vías de paso. Quizás sin tomar conciencia, nos pasamos gran parte de nuestras vidas ajustando rumbos y evitando peligros, sin tener siempre en cuenta nuestro destino final.
Cuando la sociedad sabe a donde va, el camino se va haciendo solo. Cuando no lo sabe, se dispersa. Los peregrinos que iban a Compostela seguramente irían corroborando a lo largo del recorrido: "¿es este el camino a Compostela?". Y con los siglos, esa dirección y esos caminos fueron conformando el hoy llamado "camino de Santiago" (2).
Yo tengo la fortuna de haber encontrado hace unos años un "think tank" o "usina de pensamiento" que teniendo como guía a la constitución de 1853, un día me honró invitándome a formar parte de su comité consultivo. Así - seguramente sin saberlo - me obligaron a pasar de una situación de pasiva participación como asistente a periódicas y públicas reuniones, a otra paradójicamente más activa de "pensador", de la que hago uso y abuso.
Comencé entonces de un modo diferente un recorrido personal e íntimo que voy volcando en escritos en los que reflexiono sobre lo que considero importante para la vida personal y social. Intento buscar cierta coherencia entre pensamiento y acción, y con la idea de ser útil a otros, voy tratando de ir construyendo – si no un faro – por lo menos algunas boya virtuales, con la intención de ayudar otros navegantes del pensamiento. Hay boyas que señalan rocas sumergidas a flor de agua o barcos hundidos, y las hay que simplemente muestran -normalmente en combinación con otras- un canal o un rumbo en el que el fondo está despejado de obstáculos. Y en razón de la brevedad de la vida, con cada artículo que escribo, trato de dejar detrás de mí una pequeña boya, como esta misma que lees ahora.
El hombre - ser social - necesita de los demás. La vida no es una regata "en solitario" sino más bien un crucero, o mejor quizás una "arca" como lo fue el Arca de Noé, o sea una embarcación cuya tripulación tiene un destino. Pero el hombre no puede embarcarse en diez cruceros al mismo tiempo. Sin embargo, y a modo de ejemplo, en la navegación de mi vida yo pertenezco a la Iglesia Católica Apostólica y Romana (sin intención de ofender a nadie en estas horas de la "anti discriminación"), soy miembro además del "think tank" al que hacía referencia, a un club donde tengo amigos desde la infancia; me he asociado también al grupo de ex alumnos de una entidad donde hice un curso de dirección, y a una entidad de dirigentes de empresa. También estoy cercano a un centro de enseñanza universitario y a un instituto de filosofía del pensamiento económico que funciona hace unos años ya, y donde generosamente me invitan a reuniones de gran interés y profundidad. En síntesis, voy buscando lugares que van formando parte fundamental de mi vida en uno u otro sentido, y me ayudan a mantener la derrota o a corregirla si me desvío.
Pero lo que me interesa destacar aquí es que en casi ninguno de esos lugares he encontrado un ámbito en el que se reflexione de un modo mas o menos sistemático e integrado acerca de todas las cuestiones fundamentales con las que se constituye la identidad de las personas y de la sociedad y desde donde se vayan formando hombres con el espíritu de los navegantes que desembarcaron en Normandía o el de los peregrinos que caminaban desde miles de kilómetros hacia Santiago con la intención de encontrarse a si mismos, y algo más. Por eso me interesa comentarte algo, como si te estuviera transmitiendo al oído "dos fijas" para la carrera de mañana.
Los ingleses son un país (¿uno?) especial, nadie lo duda. Sus amigos los franceses afirman que "si Dios los puso en una isla, habrá tenido sus razones". Estos dos países y estas dos culturas para mi entrañables han ido formando parte de mi vida en uno u otro sentido. Me sería difícil explicarles esta "duplicidad" a "los unos y los otros", o mejor dicho que lo entendieran ellos mismos. Las instituciones universitarias que pronto serán milenarias en ambos países como la Sorbonnne, Oxford y Cambridge, en lo que a la producción y difusión del pensamiento se refiere, han sido de hecho enormes "think tanks" cuyas ideas y alumnos ayudaron a dar forma a occidente.
Los "think tanks" de nuestros días, brindan la posibilidad de ampliar el pensamiento no solo al académico, al especialista, sino al hombre común con inquietudes, ayudándolo a corroborar su camino y el de otros por su intermedio. ¿De que sirve la elucubración del pensador si no la transmite al resto de la sociedad?. Y por otra parte, ¿es el pensamiento algo reservado al académico, al especialista, o debe derramarse sobre los "actores sociales" para hacerse vida?.
En lo concreto, las "fijas" a las que hacia referencia más arriba, son dos obras colectivas a mi entender esenciales de un pequeño "think tank" ingles: The Social Affairs Unit. En ambas el editor fue Digby Anderson, alma mater del grupo, ya fallecido; en la primera con Peter Mullen, clérigo autor y periodista anglicano, capellán del Stock Exchange (que en estos días debe tener trabajo extra). Hay otras publicaciones de este grupo, pero estas dos valen con creces el trabajo de procurárselas puesto que ilustran acerca de muchos temas esenciales de debate y reflexión para todas las latitudes.
La primera de las obras fue publicada en 1998 (cuatro ediciones en ese mismo año) y se titula: " "Faking it", o la sentimentalización de la sociedad" (3). La otra se publicó en 2005 y se titula más simplemente "Decadencia, el liviano abandono de las virtudes personales y su reemplazo por slogans políticos y psicológicos" (4). Una idea central que se transparenta en ambos libros es que la sociedad moderna vive "soñando con sistemas tan perfectos en los que no hay necesidad que nadie sea bueno" (T. S. Elliot).
En el primer libro, se describe como la sociedad moderna "supone que la utopía puede ser realizada mediante la mera adopción del plan adecuado". Como eso es imposible, explica como se ha institucionalizado en la misma sociedad un sistema de falsificaciones en las que el hombre moderno se ha acostumbrado a "comprar" lo barato, lo que no cuesta sacrificios, y lo que es peor, se hace creer a los ingenuos que el camino pasa por allí.
El sentimentalismo contemporáneo evita o niega la realidad, y al no distinguir lo aparente de lo real juzga por las apariencias, adquiere lo falso rápido y barato, cree que obtiene algo a cambio de nada, cree que el bien se puede alcanzar sin ninguna incomodidad, cree en la realización instantánea de los sueños, es facilista, rechaza la inevitabilidad del sufrimiento, del dolor, evita la responsabilidad personal, no ejerce el control de si mismo ni la paciencia, le "teme a la idea que el hombre tenga la capacidad natural de hacer el mal". En definitiva, mezcla o reemplaza el análisis racional de los mecanismos propios de la lógica del razonamiento, con los mecanismos del deseo, la atracción o el rechazo: "si me parece bueno, no solamente es bueno sino que además es verdad, y transforma entonces el discurso volitivo en discurso racional". De esta forma, transforma lo deseable u odiable en verdadero o falso.
Al reemplazar la sociedad la necesaria continua búsqueda de "pensar y actuar bien por parte de los hombres concretos" por la prosecución del progreso externo y de programas políticos que luchan por utópicas libertades, igualdades y fraternidades impuestas por falsos líderes, movimientos y gobiernos, el resultado ha sido provocar los efectos globales contrarios, "bajo la forma de totalitarismos que desembocan en destrucciones masivas de hombres y sociedades". Se han generado así nuevas categorías sociales, "sub clases" dependientes como los oprimidos, drogadictos, violentos y promiscuos" ( agrego yo: desocupados, pobres estructurales, excluidos, etc. etc.).
Las transformaciones expuestas, crean problemas insolubles, y los políticos se convierten en actores en lugar de agentes de cambio. Las campañas políticas -agregaría- se convierten en representaciones en las que nadie cree realmente; ni el que promete cree que va a cumplir con lo que promete, ni - los prometidos que votan – creen que las promesas van a ser cumplidas. Y los gobiernos se convierten en algo así como una mezcla de vendedores de autos usados y de administradores de edificios, con perdón de ambos gremios.
En cada capítulo de "Faking it", o la sentimentalización de la sociedad", un especialista describe como ha afectado la sentimentalización cada área de la actividad humana. Y así vemos causas y efectos de la sentimentalización en la medicina, en las políticas sociales, en la infancia, en los movimientos ambientalistas, en la propia religión y en la cristiandad, en la literatura moderna, en la música, en la forma civilizada de comer, en los medios. Una mención especial merece el capítulo de Anthony O'Hear (5) sobre la sentimentalización que llevó a la "canonización laica" de "Diana, la reina de los corazones" en el decir de Elton John...
El titulo del segundo libro al que hago referencia: "Decadencia, o el liviano abandono de las virtudes personales y su reemplazo por slogans políticos y psicológicos" es de algún modo auto explicativo. En el se retoma y estudia en la práctica y para la sociedad de nuestro tiempo las implicancias del imperativo aristotélico de la necesidad de la virtud en la vida social.
Así, cada especialista analiza las "viejas" y las "nuevas" virtudes, en un marco de pensamiento que considera que "Gran Bretaña, Europa y los Estados Unidos son sociedades decadentes en un sentido especial de la palabra, que han trocado la vieja moral que sirvió adecuadamente a lo largo de la civilización, por una nueva, experimental "cuasi-moral". La vieja moralidad tenía virtudes conocidas: coraje, amor, lealtad, honestidad y prudencia. Las nuevas "virtudes" son igualdad, anti-discriminación, preocupación ambiental, auto afirmación, una actitud social sobre protectora y una mentalidad crítica.
A diferencia de las nuevas "virtudes" inventadas, las antiguas eran virtudes genuinas, y requerían comportamientos específicos de los individuos que además conformaban sus vidas de un modo particular que hacía posibles los gobiernos mas reducidos, sin los tecnócratas y burócratas que como ejércitos de sanguijuelas desangran las sociedades. Las nuevas son cuasi virtudes o virtudes falsas. Algunas como la igualdad, mas que constituir rasgos de conducta personal se aplican mas bien a políticas sociales. El ambientalismo, por ejemplo, es un terreno en el que puede ser ejercida la virtud, pero en si mismo no es una virtud. La transparencia en los negocios, es una manera de mostrar virtudes, pero no una virtud en si misma. Algunos son slogans, y constituyen retóricas llamadas a la indignación moral. Otros como la auto afirmación, en algún momento eran consideradas como un vicio".
En doce capítulos, se analiza en una primera parte la prudencia como orquestadora de las virtudes, el coraje como virtud clásica, el amor como virtud cristiana, el ahorro como una virtud victoriana de orígenes calvinistas, el desinterés como la virtud del administrador, y la autoridad y la obediencia como virtudes familiares. Y en la segunda parte, se tratan las nuevas o falsas "virtudes": la justicia distributiva o justicia social, las virtudes ambientalistas, las virtudes de sobreprotección, las virtudes terapéuticas o de ayuda a la búsqueda, las virtudes en los negocios: transparencia y contabilización, y las finalmente las intelectuales como la "crítica".
Prosigo mi derrota, y dejo aquí ancladas estas dos boyas, con la esperanza mas general de que el desafío de pensar contribuya a evitar las consecuencias de no haberlo hecho a tiempo. Es mas imperiosa que nunca la urgencia en encontrar los pensamientos que guíen al hombre moderno, sobre todo si el mundo, como afirmara Jaspers, ya se ha convertido "en el escenario para los actores de pequeño formato, los intrigantes sumisos que no diferencian lo verdadero de lo falso, lo bueno de lo malo, sino que son solo los instrumentos adecuados para la función del poder", de un poder sin destino, o con un destino al que por lo menos yo, me resisto a ser arrastrado (6).
(1) Miembro del Comité Consultivo de la Fundación Atlas 1853 – pablolopezherrera@yahoo.com.ar
(2) Contrariamente, sin dirección no hay camino. Ejemplo práctico: las próximas elecciones presidenciales en nuestro país. De todos los candidatos posibles quizás sabemos o intuimos - mas allá de sus propias promesas o propósitos - que es lo que no harán, pero sabemos en el fondo mucho menos exactamente "qué es lo que harán" por mas que lo digan. Hay quién repite con énfasis y convicción: "ustedes nunca me van a ver haciendo esto o aquello", quizás sin darse cuenta que los negativos, no son incentivos suficientes como para definir un rumbo. Elegir un rumbo por eliminación de los caminos no deseados se puede, pero es mucho mas difícil: trescientos cincuenta y nueve grados mas difícil.
(3) "Faking it – the sentimentalisation of modern society", edited by Digby Anderson & Peter Mullen, The Social Affairs Unit, 1998
(4) "Decadence – the passing of personal virtue and its replacement by political and psychological slogans", edited by Digby Anderson, The Social Affairs Unit, 2005
(5) Anthony O'Hear, profesor de filosofía y director honorario a la sazón del Real Instituto de Filosofía, es autor de "Después del progreso, buscando el viejo camino hacia delante" ,
otra joya del pensamiento contemporáneo, ponderada como "vital, necesaria y erudita, ... si todavía somos capaces de aprender". En esta obra es posible encontrar un lúcido análisis acerca del progreso y la felicidad, en un mundo que ha producido mucho del primero y menos de la última.
(6) "Origen y meta de la Historia", Karl Jaspers, Editorial Alianza, 1980
lunes, agosto 13, 2007
miércoles, agosto 08, 2007
La perversión al poder
La gravedad institucional de los últimos intercambios de mensajes a través de los medios a partir del discurso de Luciano Miguens con motivo de la inauguración de "la rural" de este año, probablemente escape al común de los mortales. Pero el impacto del contraste entre dos imágenes publicadas es mas fuerte que mil palabras. La primera es la vergonzosa foto del secretario de gobierno abandonando la tribuna y la segunda es la infantil y alborozada del presidente con su candidata recibiendo al nuevo tirano de América Latina, con risitas, muecas y gestos parecidos a los que mostró en ocasión de recibir el bastón presidencial de las manos de Duhalde.
La ausencia del presidente del principal acto anual del sector agropecuario, implicaba varios mensajes directos: 1) ustedes no merecen mi augusta presencia, 2) les envío a un ya desdibujado Urquiza sin mensaje alguno, y 3) con la política agropecuaria voy a hacer lo que se me de la gana, piensen lo que piensen y digan lo que digan los representantes del "privilegio", ejemplos actualizados del "a vos no te va tan mal gordito" que inmortalizara otro augusto salvador de la patria.
El intolerante bombardeo de declaraciones de un gobierno que habla de "tu verdad y mi verdad" a partir del acto me generó las ideas que motivan el título de esta nota: "La perversión al poder". La perversión es narcisista, cínica y procura la impunidad; implica manipulación, abuso, malignidad y la denigración del otro combinada con la voluptuosa necesidad de hacerlo frente a testigos (presentes o virtuales). El que acepta sin chistar la perversión de la autoridad, acepta la construcción de un contrato o pacto que lo destruirá si la situación no cambia. La resistencia se constituye en un deber. De allí la importancia del discurso de Miguens, que implica la ruptura del contrato perverso.
En efecto: son quienes trabajan y pagan sus impuestos los que "bancan" al gobierno que sufrimos -y seguiremos sufriendo si los seguimos votando- a falta de un sistema financiero digno de tal nombre, lo que es a su vez el resultado de la política de este mismo gobierno que prefiere pagar el doble de tasa de interés a un tirano con quien arregla en silencio y "cristalinidad" y sin rendir cuentas a nadie, a una mucho mas barata a un "indiscreto" FMI (3). Como una parte substancial de ese aporte, el campo "contribuye" forzosamente por lo menos con un 25 % de su producción a mantener en un lujo insultante a quienes ostentan el poder, que se atribuyen el descontrolado rol de distribuidores de la riqueza ajena, de la que disfrutan por cierto con total liviandad e impudicia.
El "provisorio" sistema de retenciones más el impuesto al cheque que sostienen al gobierno y al engañoso "equilibrio fiscal" instalado desde Duhalde hasta ahora (quizás en su momento no había otra manera de contener la hambruna a la que nos había mandado la melaza indigesta de radicales y frepasistas llamada "alianza",) obligó y obliga a que las liquidaciones de las exportaciones "pasen" por el gobierno, quién además de retener los derechos de exportación, maneja a discreción el mercado de cambios mientras éste no se le vaya de las manos, lo que llegará ineluctablemente si seguimos con esta política que de a poco se va convirtiendo en una trampa.
Alarmados por este camino que ya ha recorrido anteriormente nuestro país, los representantes de la sociedad rural, haciendo uso de la libertad de expresión, manifiestan sus ideas, sus advertencias, sus admoniciones, y sus quejas y lamentos con dignidad y respeto ¿y porqué no hacerlo ya que el gobierno ostensiblemente no les hacía el menor caso?. Ya había sido hecho llegar al gobierno todo lo dicho el sábado pasado de manera tan repetida, discreta y prudente que para muchos los dirigentes agropecuarios "traicionaban" al propio campo...
Pero el perverso no solamente quiere que se haga lo que a el arbitrariamente le place, sino que disfruta con la sumisión de quién pretende dominar. Y por eso no soporta que alguien le cante "verdades" ... y mucho menos con un micrófono en la mano, como lo hizo inspirada, lúcida y corajudamente Luciano Miguens el sábado pasado. El camino de la libertad requiere, y va a seguir requiriéndolo cada vez más, todo lo que puso el presidente de la Sociedad Rural en la tribuna. Es un camino para valientes y para virtuosos. Pero el único camino que no es ni para valientes ni para virtuosos es el que lleva al infierno en que nos encontramos según insiste en pregonar el presidente Kirchner. Y para los que no se animen, por lo menos en octubre, "sepa el pueblo votar".
(1) Pablo López Herrera – miembro del Comité Consultivo de Atlas 1853 - pablolopezherrera@yahoo.com.ar
(2) La retórica antiimperialista del poder lo que teme del FMI son sus auditorías y "recomendaciones", como las temía también Cavallo que también se lamentaba que el FMI "no entendía" que el caso argentino era diferente...
La ausencia del presidente del principal acto anual del sector agropecuario, implicaba varios mensajes directos: 1) ustedes no merecen mi augusta presencia, 2) les envío a un ya desdibujado Urquiza sin mensaje alguno, y 3) con la política agropecuaria voy a hacer lo que se me de la gana, piensen lo que piensen y digan lo que digan los representantes del "privilegio", ejemplos actualizados del "a vos no te va tan mal gordito" que inmortalizara otro augusto salvador de la patria.
El intolerante bombardeo de declaraciones de un gobierno que habla de "tu verdad y mi verdad" a partir del acto me generó las ideas que motivan el título de esta nota: "La perversión al poder". La perversión es narcisista, cínica y procura la impunidad; implica manipulación, abuso, malignidad y la denigración del otro combinada con la voluptuosa necesidad de hacerlo frente a testigos (presentes o virtuales). El que acepta sin chistar la perversión de la autoridad, acepta la construcción de un contrato o pacto que lo destruirá si la situación no cambia. La resistencia se constituye en un deber. De allí la importancia del discurso de Miguens, que implica la ruptura del contrato perverso.
En efecto: son quienes trabajan y pagan sus impuestos los que "bancan" al gobierno que sufrimos -y seguiremos sufriendo si los seguimos votando- a falta de un sistema financiero digno de tal nombre, lo que es a su vez el resultado de la política de este mismo gobierno que prefiere pagar el doble de tasa de interés a un tirano con quien arregla en silencio y "cristalinidad" y sin rendir cuentas a nadie, a una mucho mas barata a un "indiscreto" FMI (3). Como una parte substancial de ese aporte, el campo "contribuye" forzosamente por lo menos con un 25 % de su producción a mantener en un lujo insultante a quienes ostentan el poder, que se atribuyen el descontrolado rol de distribuidores de la riqueza ajena, de la que disfrutan por cierto con total liviandad e impudicia.
El "provisorio" sistema de retenciones más el impuesto al cheque que sostienen al gobierno y al engañoso "equilibrio fiscal" instalado desde Duhalde hasta ahora (quizás en su momento no había otra manera de contener la hambruna a la que nos había mandado la melaza indigesta de radicales y frepasistas llamada "alianza",) obligó y obliga a que las liquidaciones de las exportaciones "pasen" por el gobierno, quién además de retener los derechos de exportación, maneja a discreción el mercado de cambios mientras éste no se le vaya de las manos, lo que llegará ineluctablemente si seguimos con esta política que de a poco se va convirtiendo en una trampa.
Alarmados por este camino que ya ha recorrido anteriormente nuestro país, los representantes de la sociedad rural, haciendo uso de la libertad de expresión, manifiestan sus ideas, sus advertencias, sus admoniciones, y sus quejas y lamentos con dignidad y respeto ¿y porqué no hacerlo ya que el gobierno ostensiblemente no les hacía el menor caso?. Ya había sido hecho llegar al gobierno todo lo dicho el sábado pasado de manera tan repetida, discreta y prudente que para muchos los dirigentes agropecuarios "traicionaban" al propio campo...
Pero el perverso no solamente quiere que se haga lo que a el arbitrariamente le place, sino que disfruta con la sumisión de quién pretende dominar. Y por eso no soporta que alguien le cante "verdades" ... y mucho menos con un micrófono en la mano, como lo hizo inspirada, lúcida y corajudamente Luciano Miguens el sábado pasado. El camino de la libertad requiere, y va a seguir requiriéndolo cada vez más, todo lo que puso el presidente de la Sociedad Rural en la tribuna. Es un camino para valientes y para virtuosos. Pero el único camino que no es ni para valientes ni para virtuosos es el que lleva al infierno en que nos encontramos según insiste en pregonar el presidente Kirchner. Y para los que no se animen, por lo menos en octubre, "sepa el pueblo votar".
(1) Pablo López Herrera – miembro del Comité Consultivo de Atlas 1853 - pablolopezherrera@yahoo.com.ar
(2) La retórica antiimperialista del poder lo que teme del FMI son sus auditorías y "recomendaciones", como las temía también Cavallo que también se lamentaba que el FMI "no entendía" que el caso argentino era diferente...
Kirchner, Moisés y el liderazgo político faltante
A partir de las lecturas del Éxodo incluidas en las Misas de los días pasados, es posible observar la doble misión, espiritual y material, de Moisés. En lo espiritual, transmitiendo los Mandamientos al pueblo hebreo -y a toda la humanidad- como testigo de Dios (el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob), instituyendo la Pascua y sellando la Alianza (2) y en lo material liberando a los israelitas de la esclavitud a la que estaban sometidos en Egipto. (3)
A través de Moisés se perciben con claridad las características de un sano liderazgo político de los que no abundan en nuestros días. A unos tres mil quinientos años vista y a miles de kilómetros de distancia, no puedo contenerme en realizar algunas comparaciones y paralelos algo forzados quizás con nuestro bienamado presidente -en tren de guasa o pitorreo didáctico- , dado que el pueblo argentino tiene uno que se atribuye públicamente y hasta el hartazgo la imposible e ilógica misión espiritual de "sacarnos del infierno" y la material de dejar una economía saneada y en crecimiento, o por lo menos lo que el parece entender por eso. Por lo menos déjeseme el derecho a la risa. (4)
En los hechos, y a esta altura del partido, resulta evidente que Kirchner no ha recibido la misión de llevarnos " a una tierra fértil y espaciosa, en la que mana leche y miel" (5), o por lo menos no parece haber "sintonizado la onda" como se diría en los días que corren. Pensándolo bien quizás el jerarca Moreno de algún modo asume el rol del ángel del Señor sembrando el terror entre los productores de ganado y de leche y otros. Quizás piensa que así contribuye a nuestra liberación, cuando en realidad es todo lo contrario (6).
Pero vamos a los "paralelos":
1) A Moisés lo envió Dios. Kirchner -no olvidar- fue un regalo de Duhalde.
2) Moisés vivió y gobernó inspirado por Dios. En el caso de Kirchner, mejor ni pensar en quién lo inspira.
3) Moisés dictó las normas morales que proporcionan la felicidad a quienes se rigen por ellas. Kirchner dicta todo el tiempo normas que provocan la infelicidad de quienes las cumplen.
4) Moisés llevó a su pueblo a la tierra prometida y el se quedó afuera. Kirchner nos quiere dejar con su prometida y quedarse el mismo adentro.
5) Moisés pasó con su pueblo por el Mar Rojo y este se abrió milagrosamente. Kirchner va a pasar el solo, y nos va a dejar hundir como los egipcios.
6) Moisés se consideraba poco apto para la conducción de hombres debido a su dificultad de palabra, aunque su mensaje llegó siempre con claridad. Kirchner abusa de su dificultad de palabra para sumergirnos en cataratas de poesía (verso) voluntariamente ininteligible, desde el sempiterno atril que siempre lo acompaña.
Y 7) ... no traigo a colación el kirchneriano cordero patagónico relacionándolo con la institución de las Pascuas por ser esta una festividad sagrada que no admite chanza alguna.
Saliendo de un terreno que sería jocoso si no fuera trágico, la presente divagación lleva mi espíritu a agradecer una vez más a nuestros Padres Fundadores, que a pesar de sus diferencias no dudaron en reconocer en nuestra Constitución a Dios como "fuente de toda razón y justicia" y a desear la pronta aparición del liderazgo político faltante, que para liberar a nuestro pueblo deberá estar inspirado en la práctica de las virtudes personales y sociales, además de la consabida y necesaria búsqueda del bienestar económico.
El pueblo judío vivió todo durante siglos la practica de la virtud y la politica como dos factores intimamente relacionados, sabiendo que el descuido y el abandono de la práctica de las virtudes, lleva siempre al caos y a la infelicidad de las personas, y en consecuencia de los pueblos. El bien común es integral, como bien lo sabía Moisés (7). La virtud tiene precisos requisitos y exigencias cuyo cumplimiento es precisamente lo que produce el bien común. También es necesario saber que siempre habrá quienes temen a la libertad y prefieren nostálgicamente la situación de esclavos (8) y que el triunfo del bien incluye la derrota del mal.
En "Lo que está mal en el mundo", que fue escrito en 1910, o sea antes del comunismo triunfante, antes de las guerras europeas y antes del nazismo, Chesterton decía que "la única manera de discutir sobre el mal social es teniendo a la vista el ideal social. Todos podemos ver la locura nacional, pero ¿qué es la "salud" nacional? "... Y concluía en su razonamiento diciendo que precisamente "lo que está mal (en el mundo) es que no nos preguntamos acerca de qué es lo que está bien". (9)
Quizás el ejemplo de Moisés sea un anacronismo para quienes piensan que el reloj de la historia no se puede volver atrás. Para Chesterton, "la respuesta simple y obvia es: se puede. Un reloj, siendo una construcción humana, puede ser puesto en cualquier hora. Y de un modo similar, la sociedad, siendo una construcción del hombre, puede volver a ser reconstruida según cualquier plan que haya existido".
La historia reciente en Latinoamérica (Venezuela, Perú, Nicaragua, etc.) nos muestra con qué facilidad se puede adelantar o atrasar el reloj a voluntad, y repetir los mismos errores. ¿Por qué no repetir los aciertos del pasado? Quizás esté llegando la hora de pasar de la sociología política a la filosofía política, y de la búsqueda de consensos a la búsqueda de una sociedad virtuosa y libre, como aquella por la que Moisés luchó.
Al cierre de estas líneas, una buena noticia. El sábado pasado Luciano Miguens, presidente de la Sociedad Rural Argentina decía al finalizar su discurso: " Somos herederos de un legado formidable. Pero sin los valores esenciales que supieron ser los de nuestros padres ESTAREMOS A MERCED DE LA ARBITRARIEDAD DE LOS LIDERAZGOS SIN SUSTANCIA ÉTICA" (10) .
Afortunadamente, las buenas ideas no residen solamente en los cerebros de los pensadores políticos. En buena hora. Sigamos así y hablaremos no ya del liderazgo político faltante, sino del liderazgo político emergente...
-.-.-.-.-.-
(1) Miembro del Comité Consultivo de Atlas 1853 – http://fr.f265.mail.yahoo.com/ym/Compose?To=pablolopezherrera@yahoo.com.ar
(2) "Yo seré su Dios, y ustedes serán mi pueblo" - Ex. 19, 24. La Alianza es el compromiso de Dios de cuidar, proteger y defender a su pueblo. Y su pueblo se compromete a cumplir con "los Diez Mandamientos que Yahvéh le impone". (3) Con la condición de que "c uando hayas sacado de Egipto al pueblo, daréis culto a Dios sobre este monte". Resultaría como mínimo interesante reflexionar acerca de la simultaneidad de la promesa con la instrucción: "1. seréis libres y 2. daréis culto a Dios", cuando en Occidente se pretende expulsar tan ligeramente a Dios de la historia.
(4) Entre tantos derechos humanos inventados, sorprende que nadie haya incluido el tan necesario y genuino derecho a la risa...
(5) Ex. 3, 7-8.
(6) Estas palabras de Chesterton, tambien parecen referidas a nuestro "entorno" inmediato: "Algunas de nuestras familias políticas han accedido gracias a su pedigree, enarbolando como un escudo de armas a la vulgaridad. Para muchos de nuestros hombres de estado, es inadecuado y excesivo decir que han nacido con una cuchara de plata en la boca. Han nacido con un cuchillo de plata entre los dientes". ("What's wrong with the world" - GK Chesterton, Dood, Mead & Co. Pag.50 - 1914)
(7) El mismo Moisés, para si mismo, "prefirió compartir los sufrimientos del Pueblo de Dios, antes que gozar los placeres efímeros del pecado, y se mantuvo firme como si estuviera viendo al Invisible" Heb. 11, 25-27.
(8) Ex. 16, 1-3; 17, 1-4.
(9) (Op. cit. Pág. 7)
(10) Texto extraído de http://www.ruralarg.org.ar. Las mayúsculas figuran en el texto original.
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